Marina Gutierrez
La osteoporosis se define como la pérdida rápida de masa ósea que se produce durante el envejecimiento. Esta enfermedad causa una disminución de la absorción de minerales y calcio.
Tres de cada cuatro pacientes son mujeres. Afecta principalmente a las mujeres que son posmenopáusicas.
La fragilidad de los huesos en mujeres es causada por la ausencia de la hormona femenina estrógeno, lo que los hace porosos, como una esponja. Es una causa importante de fracturas y caídas en los ancianos.
Principales factores de riesgo de la Osteoporosis
- Piel blanca;
- Antecedentes familiares de osteoporosis;
- Estilo de vida sedentario;
- La baja ingesta de calcio y/o vitamina D;
- Fumar o beber en exceso;
- Los medicamentos como anticonvulsivos, hormona tiroides, glocorticoides y heparina;
- Enfermedades subyacentes tales como la artritis reumatoide, diabetes, leucemia y linfoma.
Los lugares más afectados por esta enfermedad son la columna vertebral, la muñeca y el cuello del fémur, siendo este último el más peligroso.
Es considerado el segundo mayor problema de salud en todo el mundo, sólo por detrás de las enfermedades cardiovasculares.
Síntomas de la Osteoporosis
Además de las fracturas en los huesos y la disminución de la masa ósea, puede causar los siguientes síntomas:
- Dolor crónico;
- Deformidades;
- Pérdida de la calidad de vida y/o el desarrollo de otra enfermedades como la neumonía;
- Contracciones;
- Fracturas en las vértebras, lo que provoca problemas gastrointestinales y respiratorios.
Las fracturas de cadera pueden dar lugar a la inmovilización del paciente, y requieren cuidados de enfermería a largo plazo.
Diagnósticos posibles
Por lo general se diagnostica sólo después de la aparición de la primera caída, ya que los síntomas no se notan.
El principal método para el diagnóstico de la osteoporosis es la densitometría ósea. Esta prueba mide la densidad mineral ósea de la columna lumbar y el fémur.
El resultado se divide en tres clasificaciones: normal, osteopenia y osteoporosis.
Exámenes necesarios para detectar la Osteoporosis
Problema común en las mujeres posmenopáusicas, la osteoporosis es la reducción de la masa ósea, con cambios en su microestructura. Esta enfermedad convierte la estructura ósea del paciente en más frágil, aumentando la probabilidad de fracturas, lo que puede tener graves consecuencias.
Sin embargo, la osteoporosis es una enfermedad silenciosa que a menudo progresa sin síntomas. Mantener regularmente un seguimiento médico puede ayudarte a identificarla y comenzar el tratamiento tan pronto como sea posible.
Densitometría de la masa ósea (DMO)
La prueba de referencia actual para el diagnóstico de la osteoporosis es la densitometría ósea. Mide la extensión de la masa ósea para determinar el riesgo de los pacientes propensos a tener fracturas, ayudando a la identificación de la necesidad de tratamiento. También permite evaluar los cambios en la masa ósea con el tiempo. La prueba se realiza mediante la técnica DEXA – que es sinónimo de absorciometría de rayos X de energía dual.
El diagnóstico de la osteoporosis se realiza mediante la evaluación de la historia médica del paciente, la evaluación de la densidad de la columna lumbar y el fémur proximal, el cuello femoral y/o el fémur total y antebrazo, de acuerdo con los criterios propuestos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La densitometría ósea refleja si en la situación actual del paciente es necesario realizar comparaciones con las evaluaciones anteriores para identificar la ganancia o pérdida de la masa ósea, identificando la evolución de la enfermedad o la eficacia del tratamiento. El intervalo entre los exámenes lo determina el médico, que tiene en cuenta diversos criterios tales como el género y la edad del paciente y la precisión de la tecnología empleada, entre otros. En general, las pruebas se recomiendan con un intervalo mínimo de uno a dos años.
Las empresas estadounidenses National Osteoporosis Foundation (NOF) y la Sociedad Norteamericana de Menopausia (NAMS) recomiendan la realización de densitometría ósea para:
- Todas las mujeres de 65 años o más, y las personas que tengan enfermedades que causen la pérdida de masa ósea;
- En las mujeres menopáusicas o en transición, de 50 años o más, que presenten alguno de los siguientes factores:
- Una fractura después de la menopausia o después de los 50 años (excepto en el cráneo, la cara, el tobillo o dedos de los pies);
- Delgadez o IMC ≤ 21 kg / m2;
- Padres con antecedentes de fractura en la cadera;
- Artritis reumatoide;
- Fumadoras actuales;
- Consumo excesivo de alcohol (≥ tres dosis por día)
También hay otras indicaciones para la solicitud de las pruebas de investigación de la osteoporosis. Si estás cerca o ya entraste en la menopausia, acude a tu médico.
Como prevenir la Osteoporosis
La prevención de la osteoporosis se hace mediante la adopción de hábitos saludables durante toda la vida. Es necesario actuar con cautela después de la menopausia, ya que la caída de los niveles de estrógenos acelera la pérdida de densidad ósea, lo que requiere un mayor cuidado para prevenir la enfermedad.
Se cree que aproximadamente un tercio de las mujeres posmenopáusicas desarrollarán osteoporosis. Sin embargo, el 80% de las mujeres en la edad adulta en nuestro país no son conscientes de la relación entre la menopausia y el aumento de las tasas de esta enfermedad, que puede causar fracturas y reducir la calidad de vida del paciente. Por lo tanto, debes tener información sobre los desafíos relacionados con la llegada de esta etapa para garantizar la salud durante toda la vida, debes ajustar tus hábitos en los momentos en que el cuerpo te pide una mayor cautela.
Uno de los elementos clave para garantizar la salud de los huesos es la actividad física regular desde una edad temprana, lo que permite alcanzar una masa ósea adecuada. Los ejercicios como caminar, actividades aeróbicas y pesas contribuyen a aumentar ligeramente esta tasa, que se mantiene con la continuidad de las actividades.
Por otro lado, el cuidado de la alimentación también puede hacer una diferencia en la prevención de la osteoporosis. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), es importante comer alimentos ricos en calcio, en una cantidad de 1000-1300 mg por día – el equivalente de unas tres porciones de leche y productos lácteos. Por ejemplo, un vaso de leche (250 mg de calcio), una taza de yogur (300 mg) y una rebanada de queso (300 mg).
Tomar el sol es parte importante en el proceso de prevención de la enfermedad. Los rayos solares son necesarios para la producción de vitamina D, sustancia esencial en el mantenimiento de un esqueleto sano. La exposición a la luz solar en el momento adecuado – por la mañana y por la tarde – puede hacer una diferencia en la producción de la vitamina, que también se puede encontrar en algunos alimentos y suplementos vitamínicos.
En nuestro país, tomar el sol no es un problema – con sólo salir a la calle para realizar las tareas diarias, estamos proporcionando a nuestra piel las condiciones necesarias para producir vitamina D. Por lo tanto, es importante que las personas de mayor edad se mantengan activas, caminando al aire libre, y reponiendo el calcio a través de los alimentos y suplementos cuando sean médicamente indicados.
Tratamientos para Osteoporosis y Cuidado Necesarios
Los tratamientos actuales para la osteoporosis no revierte por completo la pérdida de hueso. Dado que la osteoporosis se diagnostica a menudo sólo después de la aparición de la enfermedad, se considera que una de las mejores estrategias son las medidas preventivas que retardan o impiden el desarrollo de la enfermedad.
Para ello, durante la juventud se debe mejorar la masa ósea máxima, para reducir las pérdidas a lo largo de la vida y prevenir las caídas. Las principales indicaciones son:
- Alimentación equilibrada con atención al calcio en la dieta (productos lácteos);
- El uso de fármacos con ingesta de calcio y vitamina D;
- La exposición moderada al sol, para que se produzca la síntesis de vitamina D;
- La práctica regular de ejercicio físico, como caminar – que estimula la formación ósea y previene la reabsorción;
- La terapia hormonal (para las mujeres).
Alimentos que Ayudan Contra la Osteoporosis
Para mitigar los efectos de la osteoporosis, es necesario el consumo de grandes cantidades de calcio. Para esto, se indican los siguientes alimentos:
| Productos lácteos | ||
| Leche | 1 taza | 292 mg |
| Yogur | 1 taza | 415 mg |
| Requesón | 1 taza | 138 mg |
| Queso en general | 28 grs | 174 mg |
| Vegetales | ||
| Espinaca (cocida) | 1 taza | 245 mg |
| Brócoli (cocido) | 1 taza | 78 mg |
| Pescados | ||
| Sardinas (en lata) | 100 g | 379 mg |
| Salmón (enlatado) | 100 g | 237 mg |
| Tofu | ||
| firme | 1 taza | 516 mg |
| regular | 1 taza | 260 mg |