¿Qué es un peeling químico?

¿Cuántas veces habéis buscado soluciones para la piel apagada, la falta de luminosidad y el tono opaco del rostro?

Las imperfecciones, las marquitas de acné y hasta algunas manchas del cutis provocadas por el sol, todo eso hace que nuestro rostro no se vea completamente bonito, saludable y lleno de luz.

El peeling químico ayuda precisamente a borrar todas esas características y ofrecernos un aspecto de lo más radiante.

Renueva la piel y la hace ver como nueva, en el artículo de hoy voy a contaros todo lo que debéis saber sobre este proceso de cuidado facial.

Lo primero que debéis saber es que un peeling químico profesional debe realizarlo un especialista, es por ello que debemos acudir a consultas de centros especializados para poner nuestra piel en las manos de un profesional.

Ellos sabrán qué activos necesita nuestra piel, dependiendo del tipo de dermis y las necesidades que tengamos.

Antes de comenzar os voy a dejar por aquí un artículo donde he dejados algunos de los exfoliantes y peeling que me han resultados muy interesantes.

¿Qué es un peeling químico?

Es un tratamiento que consigue rejuvenecer el aspecto de nuestra piel, no es quirúrgico pero siempre deben realizarlo profesionales.

Para llevarlo a cabo el especialista pondrá en nuestro rostro una sustancia formada por distintos ácidos que será abrasiva para así retirar la primera capa de la piel, eliminando con ella todas las imperfecciones y dando lugar a una dermis mucho más sana y lisa.

El producto utilizado es seguro y realiza la exfoliación profunda de forma controlada. El tipo de ácido que se utilice lo decidirá la persona que nos esté realizando el tratamiento.

Beneficios del peeling químico facial

Veamos que podemos conseguir al someternos a un tratamiento de peeling:

Nos ayudará a reducir el tamaño y la profundidad de las arrugas, tanto del rostro en general como las populares arruguitas de los ojos y la boca.
Reduce o elimina las cicatrices presentes en el cutis.
Puede reducir los brotes de acné e incluso evitar que aparezcan otros nuevos.
Reduce y elimina manchas provocadas por el sol, cambios hormonales en la adolescencia o embarazo, etc.
Consigue un tono mucho más regular y un tacto más suave de la piel.

¿Cuántos tipos de peeling químicos existen?

Cuando nos vamos a someter a un peeling en el rostro, la persona encargada de realizarlo nos ofrecerá varias posibilidades de hacerlo, entre ellas tendremos que elegir aquella que prefiramos, la que más se adapte a lo que buscamos o la que nos recomiende el especialista estudiando nuestras características.

Peeling superficial

Como su nombre indica, es el proceso más superficiales y suave de todos, solo penetra hasta la epidermis y desde ahí consigue eliminar líneas de expresión finas, manchas recientes y marcas de acné.

Es el más utilizado porque ofrece un aspecto luminoso de la dermis y ésta mejora notablemente.

Se realiza cada 15 días y no ocasiones rojeces ni irritaciones, aunque puede que la piel se vea un poco roja las primeras horas.

Los ácidos que se suele utilizar en este proceso son los famosos alfa-hidroxiácidos como el ácido glicólico, láctico, málico, tártrico y mandélico, los beta-hidroxiácidos como el ácido salicílico y el ácido tricloroacético (TCA).

Proceso de aplicación

Lo primero es llevar a cabo una limpieza del rostro.
A continuación, se aplica el tratamiento y se deja actuar durante unos 10 minutos.
Por último, se aclara la piel y se utiliza un buen tónico o producto calmante.

Peeling medio

En este proceso la penetración consigue alcanzar la dermis, por lo que es más profundo que el tratamiento anterior.

Se utiliza para eliminar arrugas finas, aunque más marcadas que las de antes, manchas más antiguas, marcas de acné en brotes activos y otras imperfecciones.

En este caso la piel se ve bastante más afectada, puede causar irritación, enrojecimiento y descamación.

Es muy importante que la piel no es exponga a los rayos de sol ni a suciedades externas al menos en una semana, ya que al estar más sensible puede causar más daño y empeorar su aspecto aún más que antes del peeling.

Se recomienda realizarse cada 3 o 6 meses dependiendo de la piel y las características de cada persona.

Los ácidos más utilizados aquí son la conocida solución Modified Jessner peel que supone una mezcla de ácido salicílico, ácido láctico y ácido cítrico o el el ácido tricloroacético en concentraciones más altas que en el proceso anterior.

Proceso de aplicación

Se realiza una limpieza facial.
Se aplica el tratamiento y se deja actuar unos 10 minutos (la piel se irá enrojeciendo o incluso adoptando un tono grisáceo)
Se aclara la piel con agua o con paños húmedos.

La piel se verá irritada y roja, puede que no vuelva a su estado normal hasta pasadas varias semanas.

Peeling profundo

El último de todos los procesos y el que consigue la penetración más profunda de todos. Llega hasta la dermis más profunda y es el encargado de eliminar arrugas más marcadas, manchas muy antiguas y marcas de acné. Además es el que mayor rejuvenecimiento de la piel ofrece.

A diferencia de los otros, este tratamiento deja la piel muy irritada y enrojecida durante al menos 3 días y descamaciones durante una semana o 10 días.

Se recomienda evitar exposición a rayos de sol y suciedad durante dos semanas para evitar que empeore el rostro.

A veces es necesaria un poco de anestesia local, aunque esto depende mucho del estado de la piel y lo que queramos conseguir.

Se hace en una sola sesión y no se puede volver a hacer hasta los 6 o 12 meses, el profesional deberá hacer un seguimiento del estado de la piel para ver como cicatriza.

Los ácidos más utilizados en este caso son el fenol y el TCA en concentraciones muy elevadas, al rededor del 50%.

Es muy importante al realizarse este peeling que utilicemos protección solar incluso sin salir de casa, ya que es imprescindible mantener a la piel protegida.

Proceso de aplicación

En este caso, el especialista ya ha mandado un tratamiento de varias semanas a base de algún tipo de Retinol para suavizar la piel y que sea más fácil realizar el peeling.
Se aplica un anestésico local en el rostro.
Se lleva a cabo una limpieza facial.
Se aplica el tratamiento y se deja actuar durante un intervalo de 30 min a 2 horas.
Se aclara la piel con agua o paños húmedos.
Para finalizar se aplica una mascarilla que deberá estar en la piel durante dos días o se vendará el rostro durante dos días también. Esto será elección de la persona y el profesional.

La irritación y el enrojecimiento puede durar hasta unos 3 meses.

Preguntas frecuentes sobre el peeling

Ahora vamos a abordar algunas de las dudas más comunes sobre el proceso de exfoliación profunda y profesional.

¿Quién puede someterse a un peeling?

Al hablar de este tipo de procesos diríamos que todo el mundo puede realizarse un peeling, pero el tratamiento va destinado especialmente a personas con la piel envejecida, con manchas, con acné o marcas de haberlo tenido, con la piel flácida, con poros muy grandes, cicatrices, etc.

Al fin y al cabo este tratamiento nos ayudará a eliminar toda esa piel afectada por diversos motivos y dar lugar a una dermis completamente nueva.

Eso sí, siempre debemos consultarlo previamente con un médico.

¿Dónde debemos realizar este tratamiento?

No hay dudas de que es un especialista el que debe realizarnos un peeling químico, independientemente del tipo que sea (de los que hemos visto más arriba).

Es cierto que algunas marcas han formulados algunos peeling químicos que son seguros de usar en casa, pero está claro que las concentraciones no son las mismas y por lo tanto los resultados no serán tan profesionales.

Todo dependerá de lo que vayamos buscando.

¿Qué tipo de ácido se utilizan y en qué nos pueden ayudar?

Algunos tipos de ácidos que se pueden utilizar de forma efectiva y segura son los siguientes:

Peeling de ácido retinoico

Este sigue siendo una de las principales armas en la lucha contra las estrías. Promueve una descamación de la piel superficial y constante, renovando y favoreciendo la formación de colágeno, lo que conduce a una mejora significativa en el aspecto de cualquier marca que haya sobre nuestra piel.

Peeling de ácido glicólico

Este se utiliza generalmente para el tratamiento de la cara, cuello y manos. El ácido glicólico se aplica cuidadosamente a la piel, dejando las arrugas más suave y menos visibles después del tratamiento.

Las exfoliaciones con ácido glicólico son excelentes, no sólo para el tratamiento de los efectos dañinos del sol (como la aparición temprana de arrugas y manchas en la piel) sino también para el tratamiento del acné y de la piel con estrías.

Peeling de fenol

Este es capaz de promover un intenso rejuvenecimiento facial en un procedimiento de 30 minutos, ya que elimina arrugas y marcas de expresión profundas al mismo tiempo, restaurando la apariencia juvenil del paciente.

Dado que proporciona los mejores resultados de rejuvenecimiento facial, el peeling de fenol está indicado sólo para los casos más graves de envejecimiento de la piel.

Peeling de ácido salicílico

En este se utiliza una solución alcohólica al 35% durante 5 minutos, seguida de una neutralización con agua y es adecuada para blanquear la piel, reducir arrugas y tratar comedones, este ácido es muy utilizado y recetado por médicos dermatólogos para tratar casos de acné, por lo que su eficacia está asegurada.

¿Es un proceso doloroso?

Cuando hablamos del peeling superficial o el peeling medio, se suele sentir quemazón o escozor durante esos minutos en los que el producto está haciendo efecto, pero no es especialmente intenso.

Sin embargo en el peeling profundo se recetan medicamentos para soportar el dolor mientras realizamos el proceso y para después de habernos sometido a él.

¿Qué debemos tener en cuenta después de un peeling?

Es fundamental que tengamos muy en cuenta que debemos evitar la exposición al sol después de este proceso, ya que la dermis está tan sensible que podría causarnos daños y además, echar a perder todo el tratamiento.

Si la dermis se está descamando no debemos eliminar esa piel, ya que si tiramos de ella y la quitamos podríamos provocar cicatrices de nuevo.

Y por último, es imprescindible que prestemos atención a todas las recomendaciones del especialista para que el proceso de curación sea excelente.

Posibles complicaciones

Para finalizar vamos a hablar de las posibles complicaciones que puede haber al someternos a un método como este.

Posibles manchas en la piel que se van con el tiempo o se quedan permanentemente.
Cicatrices de la descamación que suelen desaparecer con las semanas o meses (dependiendo el tratamiento).
Posible reactivación de herpes si eres propenso a sufrirlos.
Infecciones.
Posibles alergias a determinados ácidos.