Hace años, la única manera que teníamos de eliminar las capas de maquillaje era frotando la cara con un aceite de bebé muy resbaladizo y grasiento, o usando la clásica combinación de agua y jabón en pastilla… de cualquiera de las dos formas la cara terminaba fatal, o con un residuo grasiento que exacerbaba el acné, o más tirante y reseca que una alpargata.
Luego llegó la querida agua micelar, ese líquido mágico que eliminaba cualquier rastro de maquillaje y suciedad de la piel sin maltratarla. ¿La mejor parte? Nunca la dejaba tirante, deshidratada o grasienta.
Ha existido desde hace muchos más años, supuestamente inventada por los franceses, pero todo el mundo parecía haberse olvidado de ella hasta que, en los últimos años, se reactivó y se convirtió en un boom.
Hasta día de hoy que sigue siendo una de las opciones más elegidas por los usuarios para cuidar de la piel, mantenerla limpia y conseguir resultados satisfactorios con solo verter unas cuantas de gotas en la dermis.
Se ha convertido es un cosmético tan sumamente querido que incluso los amantes de la cosmética casera las hacen en casa mediante recetas muy sencillas y rápidas de hacer, usando solamente algunos ingredientes comunes en nuestro día a día.
Dicho esto, ¡es el momento de comenzar a hablar sobre aguas micelares caseras! para todos aquellas que queráis tener a mano unas cuantas recetas que os salvarán la vida.
Antes de nada, quiero dejaros por aquí una lista con las lociones mejores valoradas del mercado, de manera que si finalmente preferís comprar una sepáis cuales son las más sobresalientes.
¿Para qué sirve el agua micelar?
Básicamente, se define como una solución muy completa con múltiples usos. Está formada por diminutas moléculas solubles en agua ideales para usarla en la limpieza (conocidas como micelas, de ahí el nombre de agua micelar).
Estas micelas son las que atraen la suciedad, la grasa, el sebo y otras impurezas, y las eliminan de la piel de forma respetuosa y a modo imán, sin arrastrar, sino transportando.
Y aunque las micelas son pequeñas gotitas de aceite, no dejan un residuo aceitoso como los desmaquillantes tradicionales, por lo que servirá para utilizarla en las dermis grasas también.
No solo se encarga de limpiar correctamente la piel y desmaquillar de forma eficaz, sino que lo hace de forma suave y amable, sin resecar la capa más externa y dérmica de la piel, dejándola flexible e hidratada.
Es básicamente todo lo que necesitas para limpiar, tonificar e hidratar sin necesidad de aclararlo después.
Sus suaves propiedades lo hacen perfecto para pieles secas y sensibles, ya que no irrita la piel.
Y como ya hemos dicho, a las pieles grasas y dermis propensas al acné también les gustará, pues elimina la grasa extra y muchas son antiinflamatorias y calmantes.
Es el complemento perfecto para cualquier rutina de cuidado de la piel, ya que aporta muchos beneficios y propiedades, además de ofrecer procesos muy rápidos y efectivos.
Sin embargo, algunos productos contienen de todo menos ingredientes naturales, es por ello que he decidido hacerlo desde cero en casa con los ingredientes que me han parecido más acertados.
Las mejores recetas caseras con agua micelar
Voy a hablar de varias recetas, vosotros podéis elegir aquella que más os guste y disfrutar plenamente de ellas, así que ¡manos a la obra!
Recordad que todos los ingredientes que vamos a utilizar son naturales, respetuosos y que cuidarán de la dermis de forma satisfactoria. Además todos ellos se pueden encontrar fácilmente en nuestra cocina o en alguna tienda de sustancias naturales a precios muy económicos y asequibles para todos.
Por otro lado, os recomiendo que hagáis cantidades bastante controladas, de manera que nos aseguremos de no tirar nada y así evitar el desperdicio y el derroche de dinero, así que recuerda hacer justo lo que vayas a utilizar en el día.
Ahora sí, ¡podemos comenzar!
Agua micelar de agua de rosas y aceite de ricino
Con las cantidades que veremos en esta receta podremos fabricar unos 100 ml de esta loción. Como veréis a continuación es perfecta para limpiar la piel mientras alivia y aporta nutrición, por lo tanto ideal para todo el mundo.
Ingredientes
- 95 ml de agua de rosas
- 3 ml de aceite de ricino sulfatado
- 20 gotas de vitamina E
- 3 ml de aceite de rosa mosqueta
Es importante que el aceite de ricino sea sulfatado para que contenga propiedades tensioactivas que se encarguen de retirar de forma satisfactoria el maquillaje y los restos de impurezas que se acumulan diariamente.
Además la vitamina E aportará propiedades anti-edad, luchando contra el envejecimiento prematuro gracias a su composición de antioxidantes que la mantendrán protegida frente a los radicales libres, así que podemos decir que es una loción de lo más completa.
Modo de preparación
- Lo primero que debes hacer es verter en el envase el agua de rosas (asegúrate de que éste esté completamente limpio)
- Acto seguido vierte el aceite de ricino y el de rosa mosqueta, remueve todo muy bien hasta que se mezclen.
- Como último paso, añade las gotas de vitamina E y remueve bien para que se vuelva a mezclar todo.
- Antes de utilizarlo, te recomiendo que cierres el bote y lo agites muy bien, para asegurarnos de que todo se termina de fusionar.
Probablemente el resultados sea una loción de color amarillo claro, no pienses que ha salido mal, ya que ésta tonalidad se la debe a la presencia del aceite de ricino y es completamente normal.
Agua micelar de áloe vera y aceite de argán
El áloe vera es una de las sustancias más utilizadas en cosmética, gracias a todo lo que ofrece, sobre todo a la hidratación facial que aporta con solo rozar la dermis, apta para todo el mundo pero ideal para las pieles más secas.
Ingredientes
- 50 gramos de agua destilada
- 20 gramos de hidrosol de rosa (destilado puro)
- 20 gramos de hamamelis con áloe vera
- 5 gramos de glicerina vegetal
- 3 gramos de aceite de argán
- 0,4 gramos de aceite esencial de geranio
Como ya hemos visto al principio de las recetas, las sustancias las podéis encontrar en cualquier herboristería y tenerlas en casa para ir haciendo cosmética que queramos, además de tener un precio reducido, ¡cada bote nos durara mucho!
Modo de preparación
- Lo primero es asegurarnos que las cantidades son correctas, para ello es fundamental que utilicemos un peso o báscula, solo así conseguiremos la textura y eficacia deseada.
- A continuación, iremos vertiendo en el bote los ingredientes en orden, cada vez que vertamos uno removemos y así hasta el último.
- Finalmente, al igual que en el caso anterior, para terminar debemos cerrar el bote y agitar muy fuerte para que se termine de mezclar todo justo antes de que nos lancemos a utilizarlo.
Agua micelar con agua de rosas, extracto de pepino y conservante natural
Esta penúltima receta contempla un conservante, por lo que seguramente duré más tiempo en casa sin estropearse, de manera que podemos hacer para 2 o 3 días y se mantendrá en buen estado, pero no mucho más de ese tiempo.
Ingredientes
- 61 gramos agua destilada
- 15 gramos agua de rosas
- 15 gramos jugo de aloe
- 2 gramos extracto de pepino
- 3 gramos glicerina
- 3 gramos decil glucósido
- 1 gramos de Cosgard u otro conservante (natural)
- Ácido láctico (Si hay que bajar el pH)
Modo de preparación
- Lo primero será, de nuevo, pesar las sustancias e ir añadiéndolas al recipiente, para ello empezaremos vertiendo el agua destilada, el agua de rosas, el jugo de áloe, el extracto de pepino y la glicerina.
- Una vez que todo lo anterior se encuentre fusionado, es el momento de empezar a verter con sumo cuidado el decil glucósido. Si lo ponemos con mucha prisa puede ser que se haga espuma.
- Para continuar añadimos el conservante y el ácido láctico si vemos que es necesario. Volvemos a remover y ¡listo!.
Agua micelar de lecitina y aceite esencial
En este caso, si que nos encontramos con la última receta, pero no por ello menos buena, así que ¡apostad por ella si buscáis hidratación en la dermis!, además de una limpieza.
Ingredientes
- 225 ml de agua caliente destilada
- ⅛ cucharadita de lecitina, granulada o líquida
- ½ cucharadita de glicerina vegetal líquida
- ½ cucharadita de aceite vegetal (Por ej. argán, jojoba, almendras dulces, semilla de uva o cártamo)
- ½ cucharadita de jabón líquido
- Unas gotas de aceite esencial (Rosa, lavanda o árbol del té).
- Colador de malla fina
- Frasco de cristal esterilizado con tapa hermética (se recomienda un frasco de color oscuro para proteger los aceites frágiles)
- Recipiente de cristal para mezclar
Modo de preparación
- Vierte el agua tibia en el recipiente de cristal, añade el resto de los ingredientes y mézclalo muy bien.
- Si queda alguna partícula grande de lecitina, retírala.
- Por último, transfiere el agua micelar al frasco de cristal y tápalo.
¿Cómo utilizar estas recetas?
Su utilización es igual que el agua micelar comercial. Sigue estos pasos:
- Empapa una bola o disco de algodón de agua micelar y escurre el exceso.
- A continuación aplícalo por todo el rostro a toquecitos suaves, evitando frotar o estirar la piel.
- Deja que actúe durante unos segundos y retíralo con un algodón limpio.
- Repite el mismo proceso hasta que el algodón salga completamente limpio.
- Si utilizas maquillaje waterproof o rímel, es posible que necesites dejar el algodón posado sobre la piel o las pestañas durante unos segundos para ablandar.
- No frotes bruscamente, ya que te irritarás la piel o te arrancarás unas cuantas pestañas.
Esta versión casera es mucho más barata que las opciones comerciales y además te ahorras los conservantes y el perfume, ingredientes que pueden irritar la dermis.
Aunque también es posible que necesites algo más de tiempo y paciencia para eliminar por completo todo el maquillaje, debido a la falta de surfactantes.
Para finalizar con estas recetas caseras, también es imprescindible tener claro que el agua micelar se trata de un producto de uso diario independientemente del tipo de piel que tengamos, por lo tanto ¡ya podéis catalogar esta loción como vuestro limpiador habitual!.